Mi paraíso sos vos,
/ Fuente de agua viva que corre,
/ Grandes cascadas que adornan mi jardín,
/ Bello e inmenso floral,
/
/ Grato cantar del gorrión,
/ El brillo de una estrella,
/ Que ilumina la noche de mi luna llena,
/ Y el vislumbrar de tierna luciérnaga.
/
/ Eres mi rosa, mi tierno clavel,
/ Mi girasol hermoso y mi jazmín,
/ Mi dulce amapola y mi azahar,
/ De mis enternecidos naranjos y
/ Las flores de mi manzano.
/
/ En mi paraíso las aves cantan
/ Dulces trinos de amor,
/ Un gorrión que vuela,
/ Un zanate que canta,
/ Y una alondra que anida en su arrayán.
/
/ Un colibrí que goza en su flor,
/ Un jilguero que canta con emoción diciendo:
/ !Qué bello es el paraíso del amor!
/
/ En mi paraíso hay toda suerte de delicias,
/ Los manzanos ya dieron su fruto,
/ Los granados ya están en cierne,
/ Ya es tiempo de las dulces fresas,
/ Y de las moradas y rojas uvas frescas.
/
/ Mi paraíso es un dulce refugio,
/ Allí anidan las alegres aves,
/ Allí pastan los cervatillos,
/ Es un refugio de amor.
/
/ En mi paraíso hay muchas minas,
/ Hay toda suerte de diamantes,
/ Donde el oro es venero,
/ Y la plata es una fuente de riqueza.
/
/ Por eso no quiero salir de mi paraíso,
/ Allí encuentra mi alma el alivio,
/ Y mi alma sacia una gran sed.
/
/ Mi amor, mi paraíso sos vos,
/ La que baña mi gran jardín,
/ Y la que inunda mi palacio
/ Con tan suave y agradable fragancia.
/
/
/
/ Eres mi delicia, mi banquete de amor,
/ Mi dulce manzano,
/ El deleite de mi corazón,
/ Mi dulce cantar,
/ Así sos vos, mi eterno paraíso.
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